PRIMER BAILE CANADIENSE

Se podría decir que me encanta bailar, y desde que dejé España no he ido a ninguna fiesta, porque como bien sabéis eso de salir los sábados por aquí... no mucho. A menos que quieras salir con los renos que hay en mi jardín por las noches, si eso te sirve, adelante. Volviendo a lo nuestro, sí, que me encanta bailar, y que lo echo de menos, por eso cuando estaba en el gimnasio del instituto con todos los estudiantes internacionales y escuché música... no podía resistirme y me movía al ritmo y ese tipo de cosas. Intentaba reprimirme pero de vez en cuando me salía algún movimiento. 

El pasado jueves 25 de septiembre (un mes desde que salí de casa), el instituto programó un baile. Sí chicos, un jueves ni más ni menos. Y he aquí el por qué, porque no quieren que los adolescentes vayan bebidos al baile, o al menos eso es lo que me dijeron. Tema del baile: "black" (negro) así que todo el mundo de negro. Estaba deseando ir y pasármelo bien, disfrutar y bailar, bailar y bailar. Ese día al salir del instituto cancelaron "cross country" (el deporte al que estoy apuntada) y todos nos quedamos más relajados sabiendo que podíamos disfrutar de la tarde. Mi amiga Shania me invitó a cenar a su casa (y sí chicos ya me he acostumbrado a cenar a las 5.15/5.30 de la tarde) y a prepararnos juntas. Antes de ir al baile, parada en Tim Hortons para comprar un café y una vez listas nos dispusimos a entrar a lo que sería otra nueva experiencia. 

Desde las 7.30 hasta las 10.30 pude disfrutar de una noche divertida, acompañada de música, aunque hubiese elegido otras canciones y sin parar ni un segundo de bailar y con tacones.Podíamos allí mismo comprar pulseras fluorescentes, ya que para eso era el tema de negro, para que brillasen más. Acabé reventada, y al día siguiente, clase... Todo muy típico de película exceptuando el hecho de que no era un baile formal, así que nadie nos tenía que invitar. Buenas vibraciones sentí esa noche.